Mi vida en Alemania: 3 pros + 3 contras
Vivir en un país extranjero como Alemania tiene bastantes ventajas pero también algunos incovenientes. Un tema que es muy personal y por eso nada fácil de tratar de una manera general porque según las posibilidades de cada uno, las opiniones pueden ser bien diferentes y la sensibilidad siempre está a flor de piel. Pero cuando Mauricio me propuso escribir un artículo para su web Alemaniando sobre esta cuestión, no lo dudé ni un instante y no puede esperar más de un día para compartirlo con todos vosotr@s...
Mi confidencia comienza así...
Cada día son muchos los que se mudan a Alemania para probar
suerte y ganarse la vida como bien puedan. Probablemente la mayoría de estas
personas buscan una calidad de vida mejor o nuevas oportunidades laborales que
por desgracia escasean en su país de origen. ¡Qué
valientes! Mi principal motivo de traslado a Alemania fue bien diferente: mi
pareja es alemán y simplemente queríamos desarrollar una vida en común. Por
eso, aunque el proceso de adaptación al principio fue duro contaba con un gran
apoyo en casa, y me evité un montón de sofocones con los que a menudo los
recién llegados tienen que lidiar y encima en alemán (empadronamiento, búsqueda
de vivienda, darse de alta en toda serie de contratos, desarrollo de una vida
social, etc). ¡Suerte la mía!
Sin embargo, con el paso del tiempo la realidad se fue
transformando y como todos me tocaba empezar a arreglármelas sola con mis
nociones básicas del idioma alemán. ¡Pero que trabajo me
costaba memorizar y pronunciar esas palabras tan largas y llenas de
consonantes! Me apunté a algunos cursos, y estudié de manera autodidacta
durante años y años. Y sí, lo
reconozco, después de casi seis años viviendo en Alemania
todavía lo sigo haciendo de vez en cuando. La verdad, es que sin darme mucha
cuenta empecé a hablar de manera más suelta y a entender casi todo lo que me
decían y tengo que reconocer que trabajar fue lo que más me ayudó en este
aspecto. Aunque por muy bien que hables el alemán, hay cosas que nunca me
resultan igual de satisfactorias y en determinadas situaciones me puede la
frustración por no poder expresarme tan bien como lo haría en mi idioma nativo.
Por eso, el incoveniente número uno en mi lista y que creo que hay que tener
muy en cuenta si quieres vivir feliz en Alemania: es aprender bien el idioma
alemán.
El segundo incoveniente es muy engañoso porque a medida de que pasan
los años y por más que se va normalizando tu vida en Alemania,
en vez de superarlo como sería lógico se incrementa pero en negativo. ¿Qué de que hablo? De lo tremendamente que se echa en falta
a la familia y a los amigos. Por suerte y gracias a los avances, me paso el
día colgada al teléfono o a las redes sociales para tratar de enterarme de cada
novedad, detalle y nunca desconectar del día a día de las personas que más
quiero. Quizás incluso con algunas personas hable hasta más de lo que lo haría
si viviese en España. Pero para que engañarnos:
por mucha gente que conozca aquí, y por muchos viajes que haga, nunca es lo
mismo...
El tercer inconveniente en mi caso, sería la progresiva alemanización y la
lucha constante por encontrar una identidad que al final acaba a medias: yo siempre digo que soy berlinesa de vocación
y asturiana de corazón. No puedo vivir en España sin las
cosas típicas de Alemania pero a la vez en Alemania me falta algo de España. Un sinvivir, que no suele afectar demasiado al día a día
pero que en muchos casos desconcierta. En mi caso, la alemanización predomina y
cuando voy a España no puedo entender cosas tales como
quedar para cenar a las once de la noche, o me molestan tremendamente las
visitas o planes espontáneos. ¡Como si yo no hubiese
vivido así toda mi vida! Reconozco que hago todo lo posible para que no se me
note, pero nunca me voy de allí sin un típico: ¡Estás
alemanizada perdida!
Pero no todo van a ser dramas, porque vivir en el extranjero también
tienes sus ventajas. En mi caso me dió la oportunidad de poder
compartir mi vida en pareja y tener una segunda familia alemana. Alemanes
prototípicos, que me recibieron con los brazos abiertos desde el primer día. He
de reconocer que al principio, los días en familia eran para mí como cursos
intensivos de alemán pero me permitieron conocer rápidamente algunas costumbres
y valores alemanes que creo en otras situaciones serían más difíciles de vivir.
Nunca dejo de aprender algo nuevo de mi familia alemana y sin duda, esta es
mi ventaja número uno.
La segunda ventaja es
que por lo general aquí existe la posibilidad de poder desarrollarse
profesionalmente. Tanto cuando viví en el sur como ahora en Berlín, no me
fue muy difícil encontrar trabajo. Al principo mientras estudiaba alemán
desempeñé los típicos trabajos de estudiantes, como hace
todo el mundo. Gracias a la constancia, y a haber aprendido tanto a hablar como
a escribir alemán, conseguí un trabajo cualificado acorde con mis estudios
universitarios. Al principio no fue fácil, pero con esfuerzo, motivación y
seriedad es fácil entrar en el mercado laboral alemán. La seguridad,
independencia y motivación que te proporciona estar activo y desarrollar un
trabajo que te gusta es infinita y más si es en otro idioma, ¿no
creéis?
Y claro que no podía acabar sin decir la tremenda oferta cultural y de ocio
de la que se puede disfrutar si vives en una ciudad como Berlín: exposiciones,
museos, excursiones al aire libre, o disfrutar de una oferta gastronómica
multicultural increíble. Vivir en Alemania, fue el mayor motivo por el que
empecé a escribir un blog desde el que pudiera mostrar a mi familia y
amigos cómo es mi vida aquí y qué hago. Un proyecto que empezó como sin querer
y que considero la tercera ventaja de mi vida en Alemania. Porque
gracias a él, aquí estoy compartiendo mis experiencias con todos vosotros. Pero
por muy alemanizada que esté hay cosas que nunca cambian y mis mayores fans
siguen siendo las mismas de siempre: mi madre, mi hermana y mis amigas. ¡Y eso se agradece!
Espero que muchos de vosotros me contéis si coincidimos o no en
algunos de los pros y contras de vivir en Alemania o en cualquier otro país extranjero. Pero hasta entonces os
envío mucha suerte para los que ya estéis viviendo aquí o para los que
estéis pensando en alemanizar un poco vuestra vida.
¿Y que me decís los que vivís la mar de contentos en vuestros países de origen? ¿Os imaginabais algo así?
Bueno uno por lo otro, ya lo dice mi abuela, en esta vida no se puede tener todo y tienes que pensar que tu tienes mucho! Un besín guapa.
ResponderEliminarhttp://www.solaanteelespejo.blogspot.com.es/
eso es verdad, "uno por lo otro" .... :)
EliminarMira, lo único que te puedo decir es que te comprendo a la perfección, y no te hablo de vivir en el extranjero. Ese sentimiento que comentas lo compartimos hasta las personas que vivimos en España pero en una zona totalmente diferente a la de origen. Si, es un cambio menos drástico, no tiene ni punto de comparación con irse a vivir a Alemania, pero te entiendo. Un ejemplo, a mi me queda el sentimiento de no ser de ningún sitio. Si estoy en casa te dicen que ya no eres de allí : (((( (quizás por el acento...nunca me he dado cuenta si mi acento cambió o no) y si estoy en la ciudad en la que resido en la actualidad también te comentan lo mismo y por el mismo motivo... algo que nunca entenderé cuando llevo aquí 11 años. Así que,querida España,decidme de donde soy copón!!!
ResponderEliminarEl tema de echar de menos tus raices es algo que por lo menos y en mi caso se intensifica mucho más.
Muchos besos; Rocío.
pues me lo imagino perfectamente, siempre hay pros y contras y no hace falta estar en Alemania. Besos!
EliminarAyyyy, qué bonito!!!! Lo has explicado genial, y creo que a pesar de la nostalgia de tener a los tuyos lejos eres muy afortunada. Y la oferta cultural es envidiable, al menos en mi caso que esas cosas me interesan mucho. Un beso.
ResponderEliminarHola: coincido plenamente con tus pros y contras de vivir fuera de tu país natal. Desde luego si mi pareja fuera de otro país no duraría ni un segundo en marcharme con él para crear un proyecto común... es lo mejor para enfrentarse realmente a la vida y a las responsabilidades. Tienes razón que tu tuviste mucha suerte porque muchas de las personas que se van a Alemania sin conocer nada del idioma ni a nadie que los oriente al final no consiguen integrarse y terminar por regresar a España. Me alegra leer que finalmente, con trabajo, mucho esfuerzo y dedicación, estás plenamente integrada familiar y profesionalmente... ese aspecto es lo mejor de todo de abandonar tu país... tienes todo mi reconocimiento porque siempre elogio a la gente que lo deja todo y parte de cero en un nuevo país... y nada menos que en Alemania, tan diferente a nuestras costumbres... seguimos en contacto
ResponderEliminar...alemanizada perdida! Gracias por tu comentario!
EliminarPues pepa yo pienso que has sido muy valiente al marcharte a Alemania para crear un proyecto de vida en común con tu pareja, te entiendo perfectamente la morriña o nostalgia es muy normal pero quédate con lo bueno al fin y al cabo la ciudad de Berlín es genial , moderna y que esta muy de moda y eso es seguro enriquecedor ...
ResponderEliminarUn saludo guapa
es verdad! ;)
EliminarMe ha encantado. Creo que empatizo contigo en lo de que vivir fuera de tu país aporta mucho a todos los niveles pero es difícil que tu casa deje de ser tu casa.
ResponderEliminarUn beso fuerte!
Mis Periplos
Gin & Monique
sí, eso nunca cambia :)
EliminarPepilla qué post tan chulo! Me ha encantado. Eres una valiente por haberte lanzado a vivir a Alemania y me das una envidia...
ResponderEliminarAunque fué mucho menos tiempo, yo viví algo parecido con Italia, que aunque parezca que no, hay un montón de diferencias entre las culturas.
Un beso
...te creo, el tiempo siempre es relativo....porque puede ser poco pero intenso o mucho pero más fácil y parece menos de lo que es, así que no importa tanto! No sabía yo de tu etapa "a la italiana". Mamma miaaa!!!
EliminarBesos!
¡Qué post más original! Sin duda, debe ser difícil empezar de cero en un país extranjero en el que, además, el idioma que se habla no es el tuyo.Pero como todo, tiene sus cosas buenas, y en tu caso, no son pocas.
ResponderEliminarÁnimo y a seguir viviendo "a la alemana". Eso sí, no pierdas tus raíces españolas ;)
¡Un besote guapa!
Patri.
Danke! :)
EliminarPrecioso el post, eres una valiente y empezar de cero con lo complicado que es el alemán !tienes dos familias y raíces.
ResponderEliminarBesos
http://www.thetrendysurfer.com/
Danke :)
EliminarMe ha encantado, la verdad es que si vives fuera de casa, sea en tu mismo pais como en otro tienes esos inconvenientes, pero claro aqui añades el idioma, pero también tienes siempre grandes ventajas, hay que equilibrar unos y otros para poder llevarlo bien.
ResponderEliminarbesitos
eso es verdad, nada de quejas :)
EliminarMe ha encantado conocer tus experiencias y sentimientos!!besos
ResponderEliminar:)
EliminarAy Pepa, como te entiendo !! Ya sabes que yo ahora estoy en Barcelona y aunque estoy lejos, al menos estoy en el mismo país ... pero también he vivido fuera de España y echas de menos a la familia, las costumbres, los amigos ... tantas cosas !!! Es cierto que con el tiempo nos acostumbramos a todo ... pero como bien dices ... no es lo mismo.
ResponderEliminarUn besito y un articulo genial ! ;)
que bien lo sabes :)
Eliminarte entiendo y aunque no vivo en alemania sino en italia la vida fuera de tu pais es muy diferente........ he tenido la oportunidad de vivir un poco en españa y luego en italia y hasta eso era diferente.
ResponderEliminarun saludito