Mi road trip por Arizona | Día 1



¡Aquí me tenéis de nuevo! Con ningún otro propósito que celebrar con vosotros este nuevo año: ¡más que viajando! Y ya que estamos, nos vamos a un lugar bien cálido. Aparco por unas semanas los relatos de mis vida neoyorquina, para compartir al detalle: el viaje de carretera que hicimos durante las vacaciones de Navidad a Arizona. Unas semanas que me sirvieron para desconectar, olvidarme del frío desmotivante y como no: ¡inspirarme! Muchos de vosotros seguísteis día a día mis aventuras bien de cerca. Y precisamente por eso y también por vuestros comentarios: ¡sé que os ha encantado! Así que poneros cómodos, disfrutad de los paisajes y dejaros llevar. ¡Tú decides si te apuntas, y coges al vuelo uno de los asientos libres de mi Mustang!



Justo el día de Navidad llegamos a Palm Springs (California) con muchas ganas. Hace un año que habíamos hecho un road trip por California, Nevada y Utah y nos habíamos quedado con bien de ganas de conocer Arizona. ¡Y vaya si lo hicimos! El primer día, tras disfrutar de un buen desayuno americano, nos pusimos en marcha. Dió la casualidad de que no había el coche que habíamos alquilado, y a cambio recibimos un Mustang gris descapotable: ¡que no pudo ser más fantástico! Un par de horas conduciendo, bastaron para cruzar de California a Arizona. Así como si nada, el paisaje pasó de ser puro desierto amarillo a tornarse marrón y aún más seco. Las palmeras desaparecieron para dar paso a los cactus de todos los tipos. Nunca había disfrutado tanto fotografiando asfalto y sobre todo: ¡mirando las carreteras que dejabamos atrás que parecían traerte desde el infinito!







Por el camino paramos un par de veces para picar algo, otras simplemente para fotografiar lugares aparentemente normales pero que para nosotros simplemente tenían algo. Con la emoción del primer día, nos debímos de entretener demasiado. La cosa es que llegamos de noche a Prescott, un pequeño pueblo encajado entre montañas planas y famoso porque fue allí donde se celebró el primer *rodeo*. ¡Recuerdo este día como de los más auténticos! Nuestro hotel *The Grand Highland* contribuyó bastante a ello. Situado en en un edificio de lo más apuesto, justo en la calle principal del pueblo: ¡fue todo un acierto! Personal muy agradable, desayuno gratuito y habitaciones temáticas relacionadas con la cultura americana del oeste. La nuestra se llamaba *RODEO*: techo y ventilador de madera, bañera blanca de esas con patas y hasta una lámpara al más puro estilo cowboy en mi mesilla de noche. ¡A este hotelito no le falta detalle! (Aquí os dejo el enlace, por si un día se os apetece visitarlo).





Esa tarde disfruté un montón escaparateando por las tiendecitas del pueblo, mientras buscábamos un lugar donde cenar. Hay que ver como cambian las prioridades, dependiendo del clima y de los lugareños. Tiendas de botas y sombreros, bisutería a base de piedras, mucha cerámica y restaurantes *saloon* como de película: ¡en los que solo entras si empujas a conciencia una de esas puertas vaivén que se mueven hacia adentro y hacia afuera! Cenamos estupendamente en el restaurante *The Palace Saloon*. Tan solo sentarse a tomar algo algo en la barra rodeado de la gente del lugar: ¡ya es el no va más! Pero si probáis sus aros de cebolla o sus platos de carne, alucinaréis aún más. Porque es de la comida americana más buena y auténtica que he saboreado. Os imaginaréis que ese día dormí genial: barriga bien llena, un montón de experiencias nuevas acumuladas y otras tantas aún por llegar nada más despertar. Y que os voy a contar, a mi lado: ¡el mejor compañero de aventuras, que nunca me podría imaginar encontrar!



¿Qué me decís? ¿Ya conocéis Arizona? Estad atentos porque en nada tendréis la segunda parte del viaje. Pero mientras tanto, espero impaciente vuestras impresiones y comentarios. ¡Decidme pero ya, si os ha gustado! Y ya que estamos: ¡Feliz Año!

Y si os apetece, nos vemos en las redes sociales: ¡donde comparto mi día a día y un montón de recomendaciones más que seguro os encantarán! Instagram Twitter

¿Te ha gustado el post? Pues quizá también te interese lo siguiente:
Mi viaje de carretera por California, Nevada y Utah

Comentarios

  1. Eres toda una aventurera Pepa!! En ese pueblo, al más puro estilo cowboy, sé de buena tinta que estabas en tu salsa 😁😁😁

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias sister! Espero que un día nos vayamos a la aventura juntas ❤

      Eliminar
  2. Me encanta Arizona, si decides vivir ahi,yo te acompaño.

    ResponderEliminar
  3. No son los lugares que más me llaman la atención, pero un viaje así siempre es una pasada! de película!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Entonces a ver qué me dices de lo siguiente! La cosa se pondrá aún más interesante 😄

      Eliminar
  4. BRUTAAAAAAAAAL!
    Besos rojos por doquier!!!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario